viernes, 22 de marzo de 2019

Nada es lo que parece.




Y vas a la panadería y preguntas lo insólito: “¿hay pan?”
Y la respuesta es aún más insólita: una mirada de rareza, una sonrisa burlona.
Te vas por el queso pero resulta que hay huevo,
Cambias la lista de nuevo.
Tras un par de horas,
Alguien pasa por la cola y grita: “¡Se acabó el huevo!”
“¡Chinazo!” responde otro,
A casi nadie le causa gracia.
Ya no es gracioso llegar a casa con las manos vacías.

“¿Hay café?” preguntas en las cafeterías.

“¿Hay medicinas?” preguntas en las farmacias

No hay ascensor, se fue la electricidad de nuevo, subes las escaleras.

“No encuentro la vela” te reciben. 
La vela se quedó en 1792.

La basura ya no es solo basura, es comida.
La comida es dolor, sufrimiento.
La cama es el lecho donde desde temprano se acuesta a los niños para olvidar el hambre y el llanto.

Las caras lánguidas y palidecidas, son rutina.

Pero las lágrimas...
Las lágrimas serán de alivio muy pronto, cuando todo quede atrás, cuando se vea la luz al final del túnel,
porque la esperanza es lo que es y es lo único que nunca falla.






viernes, 22 de febrero de 2019

Caracas con C de...


Ciudad del caos, confusión, calamidades.
Calma al pie del cerro Ávila, convulsión en el cerro de Petare.
Calles de colores, cálidos aromas.
Compadres todos.
Capital del cielo y el infierno, 
Corazones valientes,
Cuerpos cansados,
Caras pícaras.
Consciencia colectiva pero callada.
Casas y camas para amigos, vecinos y quien quiera.
Carcajadas por casi cualquier cosa.
Cólera,
Compasión.
Cazar una vida mejor, cada día.
Caseríos en Cagua, Casarapa y Caripe.
Cacique en Cuyagua y Choroni.
Carpas en Chuao y Chichiriviche.
Cocuy en Caruao.
Consensuadas caricias, calor de cuerpos unidos.
Conexión,
Caminatas consecuentes.
Caracas, con C de: Cabemos todos.



jueves, 21 de febrero de 2019

Eres


¿Que eres?
¿Eres tormenta?
¿Eres abismo?
O eres la calma después de la tormenta.
O eres la atracción del abismo.

Lo eres todo, amado.
En tus ojos, el universo entero.
Sobre tu pecho reposa mi ser.
En cada uno de tus lunares, mueren y reviven mis labios.

Lo eres todo,
La espina y la rosa,
El veneno y el cáliz de vida.
El comienzo y el final.
Lo atemporal, lo que no nace ni muere.

En ti, existo.
En mi, naces y renaces.
Somos el todo y somos la nada.
Nos encontramos descubriendo lo visible y lo invisible.
En ti convergen lo tangible y lo intangible.

Eres un tú eterno.
Eres tú, y sólo eso.


miércoles, 20 de febrero de 2019

Santiago

 

Sueño profundo.
Sangre de mi sangre.
Deseo cumplido, materializado.

Y llegaste en una suerte de noche sagrada,
Sublime.
Sabor a moras con miel.
Simple,
Siempre sonriendo
A veces soberbio, 
Sabio.

Sabrosos son tus besos.
Serenas tus caricias.
Sordas tus pasiones de infante.
Saboreo cada momento a tu lado
pues es bien sabido que serán efímeros. 
Segundos que como sabuesos acechan para llegar y partir,
Salpicando de memorias nuestras mentes.

Sabatinos juegos que se repiten todos los días.

Ser de luz.
Sincero.
Tu saga apenas comienza.

Sacudirás el mundo a tú paso, de la mejor manera.
Sabrán tu nombre en los sinfines del mundo.
Llevas nombre de rey, 
Seleccionado por ti, susurrado a mi corazón.

Siempre seré tú Selene.
Tú, el sol naciente. Luz que todo lo puede.
Sensible,
Sereno.

Saldada está mi deuda con la humanidad al traerte a la vida.





sábado, 26 de enero de 2019

Para ti (Lipograma sin la E)



Cuando hablas, mi insomnio mira hacia ti.

Amo todo lo tuyo.
Amo tus labios, tus ojos, tus palabras...
Adoro cuando callas y miras profundo.

 Admiro mucho tu trabajo, tu labor sin cansancio. 
Casi nunca lo digo, difícil admitirlo, más sin ti, mi vida no avanza y aún así, contigo tampoco. 

 Anda, haz lo tuyo, 
para mi, nada más importa sino mirar tus alas abrir al ocaso.
Y si cambias tu rumbo y tornas a mis brazos, 
con valor y sin palabras, mi calor calmará tu frío.
Mi sombra cobijará tu cansancio.

Calla
No importa.
No juzgo.
Sin pronunciar signo alguno, tomo tus manos,
Y caminamos...

viernes, 25 de enero de 2019

Por ti (lipograma sin la A)





 Qué difícil es tejer y destejer sueños sin ti, 
de noche, en silencio, 
Y me sentencio. 

 Pienso en tu cuerpo, en lo impronunciable, 
en ese tiempo sin tiempo que te prometí. 
Y te deseo, y es un deseo invisible 
Un deseo irreflexivo que me come los dedos. 

 Es poco decir que respiro por ti, 
Lo cierto es que no solo vivo por ti. Escribo, y es por ti. 

 Esos sonidos mudos 
Esos juegos sordos que vencen mis recuerdos y no me permiten dormir.
Un tiempo en el que fuimos uno,
Fundidos. 
El universo fue nuestro y fuimos nosotros,
Fuimos el todo.

 Eres culpable único de que mis sentidos se nublen, se doblen.
Estoy, por ti y en ti, legible y visible.